Recordaba en mi mente, la vista del gran Icono de San Francisco, el GOLDEN GATE, el impresionante puente colgante, con su característico color naranja, desde diferentes lugares, de viajes anteriores.
Recuerdo las fotos del puente, desde la Isla de Alcatraz y desde el Palacio de Bellas Artes, fotos de día y de noche, pero hoy me tocaba ir a Sausalito, con parada en Battery Spencer. La noche estaba muy fría, la soledad de la niebla invernal y la majestuosidad del Océano me han dado el mejor regalo de Reyes.
Me he pasado un buen tiempo, disfrutando de esta obra de la ingeniería, construida en 1933, por donde circulan los coches y camiones de la ruta 1 californiana y de la US 101.
Sus dimensiones apabullan, casi un siglo después, con sus 2737 metros de largura y los 227 metros de altura de sus dos torres.